En el principio choto fue la palabra que dio duda al nombre; tras la nebulosa, el nombre dio forma, el sustantivo y el adjetivo que nombra y describe: acto de habla performativo: la transformación. El espacio de exclusión. El no-lugar.
Choto fue la herida viniendo de fuera pero clavándose muy dentro. Horadando. Palabra-topo que crea su madriguera bajo la corteza. Espíritu roído. Dolor en silencio. Cho-to: silabeo que geografiza el cuerpo; lo marca: estigma.
Tiempo después: el orgullo. La paz.
¿Desde dónde hablas cuando dices, choto?
No hay comentarios.:
Publicar un comentario