Empecé mis lecturas de este año con una que me pareció una historia bien lograda, con una trama cuyo suspenso no sólo se mantiene sino que aumenta a mediada que avanzamos en el recorrido literario, se trata de El Lector, de Bernhard Schlink.
La anécdota se podría resumir así: un adolescente quinceañero conoce accidentalmente a una mujer de treinta y seis años; la coincidencia fortuita será el inicio de una historia de encuentros y despedidas a través de los cuales, y guiados por la voz del narrador masculino, conocemos la profundidad de la huella que esa mujer ha dejado en el joven. Ambientada en la Alemania de la posguerra nos adentramos en el conociemiento de los retos que tuvo que enfrentar la generación siguiente a aquella que presenció la Segunda Guerra Mundial.
Se trata pues, de una lectura ágil pese a sus doscientas páginas, que consigue seducirnos con los planteamientos en torno al amor, lo moral, la razón que el autor presenta; en definitiva, un texto que logra ser la historia de amor que no pudo ser.
Schlink, Bernhard, El lector, Anagrama, Barcelona, 2006
PD. Próximamente se estrenará la película basada en esta novela. El director es Stephen Daldry y la protagonizará Kate Winslet.
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